LA OBSESIÓN POR LA FUGA. De un anecdotario carcelario. 


En los reclusos condenados a penas altas, es natural el tener presente la posibilidad de fuga , en algunos casos al grado de obsesión sin prestar interés a la peligrosidad que esto representa.

En esta historia del recluso "Puro coca", este deseo de fuga era una fijación constante, desesperado por los años sin libertad y más aún por los que le esperaban. Vivía indagando con los reclusos más viejos buscando información e historias sobre el asunto tratando de descubrir la varita mágica para concretar su anhelado sueño.

Era la desesperación como respuesta tardía al hecho o crimen cometido y que ya no tiene vuelta atrás, era el absurdo atrapado en la realidad y no valía arrepentimiento ni la biblia debajo del colchón.

Puro no tenía recursos para orquestar algo siempre tan complicado y con tanto riesgo, debía contar exclusivamente con su escaso espacio mental y su reducido número de posibilidades, pero cuando hay deseos y la vida esta presente, no hay límites para la imaginación, además de la voluntad.

En su constante búsqueda conoció de los casos de "locura falseada" que resultaron exitosos pues los reclusos que usaron esta táctica fueron trasladados al manicomio, lugar con muchas más facilidades para una fuga exitosa. Indagó los detalles, como por ej. las heridas que se infringían, los choques con otros reclusos, su comportamiento en sentido general y el detalle mas complicado, revolcarse en materia fecal y algo aún mas complicado todavía, comérsela, de esta manera la policía se podía convencer de que la locura no era un fraude.

Tamaña prueba por la que pensó decidirse, pero así la eligió. Se preparó como todo un gladiador antes de su pelea contra los barrotes en busca de la felicidad que proporciona la libertad.

Durante dos días permaneció en cama arropado de pies a cabeza emitiendo sonidos extraños y murmurando disparates, y logró llamar la atención, ya los reclusos se hacían preguntas ademas de conjeturas ¿ que pasa con Puro?, ¿se desesperó?, i debe estar enfermo!, ¡ no, tiene la cárcel en la cabeza, esto es para hombres!

Una mañana cerca del mediodía, de repente salio a correr por los pasillos vociferando, se estrelló contra las paredes causándose heridas, ya tenía calculado a cuales reclusos atacaría, tenía seguidores, mas bien curiosos que sin saberlo contribuyeron a la expectación.

La algarabía que se oía en todo el penal atrajo a dos carceleros que vinieron a investigar el alboroto. Puro, que ya tenía la materia prima ubicada en sitios estratégicos, le dio el uso que se requería, se embadurnó con ella y en medio de los pasillos brincó y se lanzó contra los dos incautos policías que mordieron su anzuelo, a uno de ellos lo abrazó mientras el otro lo golpeó tratando de separarlo de su compañero sin lograrlo, mientras, la sangre y la mierda se confundieron en una mezcla de colores desconocidos.

Al rato, varios policías y los enfermeros del hospital llegaron a recoger al hombre ya debilitado, Puro solamente tendía a escupir "el manjar" y reír como lo que no era. No conforme, se zafó de los verdugos y corrió en el patio al tiempo que se desnudaba, mientras miles de voces lo alentaban. Ya agotado, se acostó en el suelo ardiente y adoptó una pose de estatua.

Me intrigó sobremanera conocer el resultado final de esta hazaña. Pregunté a prebostes y carceleros sobre el caso y me dijeron que Puro estaba amarrado a una cama hablando disparates, rugiendo como un animal, y que tenía como 15 puntadas en la cabeza producto de los macanazos.

Una mañana vi a varios policías llevando a un hombre a la parte trasera de una camioneta, era Puro coca con más soga que un andullo voceando, ¡¡ "Llévenme a mi cárcel" !! , ¡"No quiero irme de aquí "! , ¡"Me van a tirar al mar"! 

(Viendo esta actuación, si fuera filmado habría que darle los globos de oro y el Oscar aún sin nominarlo).

Al mes nos enteramos de que había trepado una pared de tres metros y se había escapado logrando su anhelado sueño.

Nunca imaginé que un hombre con tantas limitaciones, burdo, sin preparación, podía lograr un plan tan perfecto, y es que a pesar del concepto abstracto de la palabra libertad, es tan patente su significado que no importan causas ni colores de los protagonistas, esta ejerce un poder mágico en el ser humano difícil de evaluar.