lunes, 26 de octubre de 2015


Preguntas.

¿Dónde estás madre?
o mejor desconocida
no digo amiga, nunca lo fuimos.

¿Qué pasó con tu instinto de mujer?,
¿te avasalló la fuerza del hombre
que me arrancó de tus brazos?
¿De qué nacionalidad eres
y
de mi sangre,
cuál es la otra mitad ?

Tu apellido Cairo,
me dirige a zonas lejanas,
tu rostro en fotos me lo cuenta, creo.

Te imagino con velos y turbantes
cubriendo tu bello rostro
eso agrega más suspenso y drama
a incógnitas sin sufrimiento.

Mi amor por el arcano
me da sonrisas
en vez de lágrimas, es verdad, Ayda.

Así soy, quién sabe si la parte
de tu adn que me toca,
ha sido el motivo de que aún
lo esté contando y muchas cosas más.

Sabes, tus relevos me han cuidado bien,
hasta ofensas por mi causa han padecido
y en la oscuridad me han alimentado.

Espero no hayas sido infeliz, pues,
la sangre es la sangre y eso ni Dios
ni el Diablo lo quita.

4 comentarios:

  1. Es una historia triste que ha dado lugar a un poema esperanzador y hermoso pese a la historia que nos cuentas que ha dado lugar a ese hombre que eres que dice con ternura al final del poema," espero que seas feliz". Creo que ahí queda claro de que materia estas hecho.

    Me gusta como va creciendo el blog, aunque es de reciente creación lleva un ritmo ascendente de admirar.

    Me gustó, Orlando.
    Un abrazo.

    ResponderBorrar
  2. Gracias John Madison tus palabras son más emotivas que el poema. Todavía tengo baches con el diseño del blog pues no soy muy práctico en esto. Mis saludos.

    ResponderBorrar
  3. Lo ignorado e intuido participa del misterio enigmático de la vida.
    Sospechar es mostrar algo escondido en nuestra memoria genética o vivida.
    La sonrisa suaviza la exposición. Gracias Orlando.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Galefod Gal Así es, lo ignorado también es un estímulo, depende cómo se mire.
      Gracias por tu visita.

      Borrar